Las coloridas casas de barro de Asir, Arabia Saudita.

 
   
       
 
 


En la foto de la derecha tenemos la casa de Bin Hamsan a las afueras de Khamis Mushayt en la provincia de Asir, Arabia Saudita. Es una versión moderna de los hogares tradicionales de Asir de arcilla y limo (abajo) con un patio interior. La provincia de Asir forma parte de las tierras altas de Arabia a unos 2000 metros sobre el nivel del mar.

   

 

 

 

     

El clima es moderado varía de los 12°C (54°F) a 21°C (70°F) y no hay mes en que no falte la lluvia y un viento del este que trae polvo del desierto. Siglos de vivir en estas condiciones dieron paso a casas de piedra en las colinas y a casas de barro en los valles. Las paredes de barro (arcilla), de unos 50 cm (20 pulgadas) de espesor, descansan sobre una capa de piedra. Se construyen hacia arriba por etapas, dejando que cada nivel se seque, después cada nivel se cubre con losas de piedra que sobresalen. Las paredes de barro tienen una inclinación hacia el interior y su grosor se reduce a medida que ganan en altura. Esto disminuye la cantidad de material y la presión de las paredes inferiores. Las paredes de arcilla se levantan en las esquinas imitando la arquitectura de los edificios de piedra, pero la característica más llamativa son las losas que sobresalen de las paredes, que hacen que la lluvia caiga en cascada, lejos de la vulnerable arcilla. Para más información podéis descargar este documento, en inglés, sobre la arquitectura vernácula de Asir.

Lo que hace que los hogares de Asir sean tan especiales son los adornos de colores que se propagan por toda la casa, por dentro y por fuera (ver abajo a la izquierda). Los hombres son responsables de la construcción de las casas, mientras que las mujeres se encargan de decorarlas. Los frescos no se consideran obras de arte, sino un reflejo de la habilidad de las mujeres que así expresan su personalidad en el exterior, en una cultura masculina que les obliga a retirarse de la vida pública.